Táchira afina políticas públicas para mitigar crisis en sus servicios
La gobernadora del Táchira, Laidy Gómez, informó que están rediseñando metas físicas, acciones procedimentales y políticas públicas, ante la falta de presupuesto en las gobernaciones del país, con el fin de mejorar la prestación de los servicios públicos.
En entrevista con el programa Primera Página, transmitido por Globovisión, destacó que solicitó a los miembros del consejo de gobierno poner a disposición sus cargos a fin de “revisar y tener personas que puedan asumir con resistencia esta crisis que estamos viviendo dentro de la administración pública”.
Impacto de la migración
“Tenemos muchas deficiencias por migración de personal, no hemos podido tener cuerpo técnico, que garantice procesos de contratación y ejecución”, acotó.
Reafirmó que la entidad continúa afectada por las fallas en el suministro de combustible y la crisis de los servicios públicos como la electricidad, agua y gas.
“En las últimas semanas se ha venido incrementando la deficiencia en la distribución de combustible, no hay un control en las estaciones de servicios. La gente duerme tres, cuatro días en las bombas y no existe una coordinación o garantías de la distribución”, apuntó.
No hay respuestas
La funcionaria cuestionó que los organismos a los que le compete la distribución de gasolina, “no den respuesta, mejoras o condiciones para que se pueda mitigar esta situación hostil que estamos viviendo los tachirenses”.
Además denunció que se ha negado el surtido de combustible a las ambulancias “no hay prioridad a las situaciones de movilidad de emergencia”, dijo.
Ratificó que otros sectores como el productivo, educativo y salud, “están siendo completamente vulnerados con esta crisis de combustible y no hay ente nacional que tome cartas en el asunto apara moderar esta situación tan crítica”.
La misma situación en otras zonas fronterizas
El Observatorio Venezolano de Servicios Públicos (OVSP), ha recalcado en su último informe que tras los apagones y las continuas fallas eléctricas, no solo las zonas fronterizas sino muchas regiones del territorio nacional han atravesado un calvario con el suministro de agua y los otros servicios básicos presentan problemas colaterales que afecta el proceso de retomar la rutina de los venezolanos.
Luego de haber pasado al menos siete apagones de gran escala: “La consecuencia de los apagones en los servicios públicos ha sido el deterioro acelerado de los mismos, ya que a falta de la energía eléctrica agudiza la situación existente”, aseveró Julio Cubas, representante del OVSP.
Dijo que hasta enero de este año, el servicio peor evaluado por los ciudadanos era el del agua potable, en vista de la falta de continuidad de bombeo en gran parte del país. Pero ahora es el de el sistema eléctrico y el concerniente al de la gasolina.
Sin luz
En efecto, indicó que el Sistema Eléctrico Nacional no logra garantizar la estabilidad del servicio en todo el territorio nacional por su vulnerabilidad.
De acuerdo con Cubas «esta dependencia es superior al 60%, con lo que el restante 40% debería ser suplido por fuentes de generación termoeléctrica, cuyo ‘parque’ está a menos del 15% de su capacidad de generación según fuentes consultadas”.
Para el momento, se estima que la falla actual se traduce en un esquema de racionamiento obligatorio, debido a que el accidente ha derivado un déficit de al menos 1.000 Megavatios del sistema interconectado que deja a la oferta por debajo de la demanda de energía eléctrica en el territorio nacional.
Lo anterior explica las fallas en 22 estados en todo el territorio nacional (Anzoátegui, Apure, Aragua, Barinas, Carabobo, Cojedes, Dto. Capital, Falcón, Guárico, Lara, Mérida, Miranda, Monagas, Nueva Esparta, Portuguesa, Sucre, Táchira, Trujillo, Vargas, Yaracuy. Bolívar y Delta Amacuro con fallas de voltaje) y Zulia sin luz con más persistencia que el resto del país.
