Emerge una nueva visión
Por fin los venezolanos hemos entrado en el negocio de los hidrocarburos, finiquitando aquella extravagancia del puntofijismo que excluía de su explotación a los propios dueños. El acto de apertura del gas del 29 de junio constituye un hecho histórico significativo, no por su magnitud sino por iniciar el noviciado gubernamental “forzando” la participación de empresarios venezolanos. Y puesto que no se trata de crear una oligarquía petrolera que lucre con la propiedad común, el reto de la revolución es ahora “forzar” una amplia participación ciudadana en los distintos niveles del negocio, creando la trama generadora de riqueza social bajo el signo de la equidad. A la manera asiática —sin tiempo para que las fuerzas del mercado actúen espontáneamente— la mano visible del Estado debe orientar el despertar de las fuerzas productivas hacia una asociación de signo igualitarista con el interés popular, en función de nuestras especificidades de país petrolero.
Seguridad social en economías petroleras
Siendo que el 65% de los venezolanos se desenvuelve en la economía informal o está desempleado ¿qué incentivos tendrían para aportar al seguro social si el Estado les asegura su pensión total según el proyecto de la Asamblea Nacional? La idea no sólo es inviable financieramente sino que además desmotivaría al 35 % contribuyente, activando un componente autodestructor del sistema.
Además de las referencias exitosas de economías convencionales, la Asamblea debería poner el ojo en aquellas democracias petroleras —espécimen exótico— que han logrado conciliar la seguridad social con la estabilización macroeconómica mediante la creación de fondos petroleros de propiedad colectiva generadores de empleo, ahorro e inversión.
A diferencia de nuestro (%=Link(«http://www.bcv.org.ve/fiem/fiem.htm»,»Fondo de Inversión para la Estabilización Macroeconómica»)%), concebido como reserva confinada, al margen del mercado de capitales, el (%=Link(«http://www.apfc.org»,»Fondo Permanente de Alaska»)%), el (%=Link(«http://www.treas.gov.ab.ca/business/ahstf»,»Fondo Patrimonial de Alberta»)%) y el (%=Link(«http://»,»Fondo Petrolero de Noruega»)%), combinan la estabilización de la economía y la democratización del ingreso petrolero con la seguridad social. Invierten en acciones locales y globales y en renta fija, dinamizando la economía y generando nueva riqueza, que se transfiere a los ciudadanos según distintas modalidades. El primero, propiedad de los ciudadanos de Alaska, entregando anualmente un cheque con dividendos a cada habitante, induciendo el asentamiento poblacional. El fondo canadiense, animado por una filosofía más comunitaria, financiando iniciativas que eleven el nivel de vida de los ciudadanos como promover el turismo, la conservación y la educación ambiental. El fondo noruego está concebido como una caja de ahorro colectivo destinado a las futuras generaciones, previniendo la mengua de las reservas petroleras.
Fondo de los Venezolanos
Y obviamente, no podemos dejar pasar la oportunidad de presentar la propuesta que venimos desarrollando con Alberto Quirós Corradi (ver revistas CIED – PDVSA Nº 5 del 5/99 ó PETRÓLEOYV del 7/00 en nuestra página web) de creación de un Fondo de los Venezolanos integrado al sistema de seguridad social, basado originalmente en acciones de empresas estatales reconvertidas y regalías petroleras, y destinado a potenciar el ahorro y la inversión nacional, que bien podría complementar el proyecto de la Asamblea. Combina el reparto universal (al 100% de los venezolanos adultos) con la capitalización individual, animando una educadora asociación de los ciudadanos a los procesos productivos. Por lo demás, contiene un tremendo potencial político como factor de unión nacional, nada desdeñable en estos tiempos.
La referencia a la nueva visión que emerge expresa un sensible reconocimiento al grupo Visión Emergente, liderado por Cipriano Heredia, el cual ha tenido la voluntad y el valor de presentar su Proyecto de Democratización de la Industria Petrolera a la Asamblea Nacional Constituyente en 1999, sembrando la semilla que hoy florece en la apertura de los hidrocarburos y acaso en el nuevo sistema de seguridad social. Vaya nuestro aliento a la profundización del tema.
