Hasta cuándo seguiremos aguantando
Continuas protestas salariales, amenazas de colectivos a lo que ellos denominan «chillería», alza incontrolable del dólar que pulveriza los salarios en Bs., declaraciones de Maduro en las que afirma no tener con qué pagar los aumentos salariales, fallas continúas en el suministro de gasolina en el interior del país, un recrudecimiento de la delincuencia, eliminación de cátedras en las universidades por que no hay inscritos, gente literalmente muriéndose de hambre, hospitales en pésimas condiciones, apagones eléctricos cada vez más frecuentes, matraqueo policial, transporte terrestre más escaso y costoso, emigración constante y precios de los alimentos que aumentan día a día, ya que la inflación es indetenible.
¿Nos estaremos refiriendo a algún país africano en guerra, o a Haití? Lamentablemente no, pues ellos están relativamente mejor. Esta es, y sólo parcialmente reseñada, la situación existente en Venezuela en enero de 2023.