El arte más íntimo viene de Praga
(%=Image(3935788,»L»)%) La música, escribió Hugo Claus, “tiene sobre el lenguaje verbal la ventaja de no necesitar aseverar nada, la semántica no le afecta”. Afirmación que tal vez podría ser una de las claves de acceso a la estética obscura y cristalina del Teatro Negro de (%=Link(«http://www.praga.cz/»,»Praga»)%) , pues en palabras de su productor Pavel Hortek, la música y la danza son las fuentes que nutren este espéctaculo que, cerca de sus cuarenta años, no deja de impresionar e influenciar la escena teatral contemporánea.
Hortek, acompañado por su Director Artístico, Teter Benes y la leve Marketa Holubova, protagonista debutante, dialogó con los medios sobre el alcance y futuro del Teatro Negro de Praga. A partir de este sábado 25 (Teatro Teresa Carreño), esta agrupación checa iniciará una gira, auspiciada por la Embajada de la República Checa y Contemporánea Producción Artística, presentando “La Bicicleta Voladora” por destinos tan dispares como Maracaibo, Mérida, Valencia, Barquisimeto, Maracay y San Cristobal.
En medio de la obscuridad nosotros soñábamos…
En “Las Cosmicómicas” de (%=Link(«http://rehue.csociales.uchile.cl/rehuehome/facultad/publicaciones/autores/calvino/calvino0.htm»,»Italo Calvino»)%) el protagonista (inexistente) describe la sensación de autocrearse, casi amasarse en las tinieblas iniciales del Universo. Este informe ser nos confiesa que “en medio de la obscuridad nosotros soñábamos otra obscuridad porque no se nos ocurría otra cosa”, descripción que puede ubicarnos en la poética del Teatro Negro de Praga, en el que las imágenes siguen el ritmo de la música, con “una enorme influencia surrealista que envuelve con ilusiones los argumentos profundos dirigidos fundamentalmente a los adultos y, principalmente a quienes conservan su niño interior”, señala en perfecto español Pavel Hortek.
(%=Image(3485624,»R»)%) Su primer éxito internacional fue en el (%=Link(«http://www.eif.co.uk//»,»Festival de Edimburgo»)%) en el año 62. “En esa oportunidad, relata Hortek, nos denominaron el teatro de los milagros grandes. La gente estaba admirada que con las manos se pudiese crear toda la ilusión. De esa manera, se ha mantenido, porque “ …el Teatro Negro de Praga, mas allá de los profundos cambios polílticos, ha vivido su propia vida, lo cual nos ha permitido mantener un estilo creativo único.”
El Teatro Negro de Praga está basado en un truco muy antiguo, que nació probablemente en China hace más de 2000 años, con el cual los objetos parecen danzar en el aire por un efecto visual muy utilizado por los magos y en el séptimo arte, pero que incursionó por primera vez en el teatro en 1961, gracias a Jiri Srnec fundador de este grupo.
Las cosas que se observan en el escenario se hacen todas con las manos. El Concepto estético de esta agrupación se sustenta en un trabajo prácticamente artesanal en relación a la puesta en escena, mientras que el backstage se nutre de las últimas tecnologías. Señala Hortek, que el apego a su técnica tradicional “es una manera de hacer contrapeso a esta época tan tecnológica”.
(%=Image(4930149,»C»)%) No sólo (%=Link(«http://www.cyberspace-creations.com/phonehome/»,»ET…»)%)
La emoción de ver a Elliot volando en bicicleta junto a ET, apenas se apróxima a la propuesta visual-afectiva del Teatro Negro de Praga en “La bicicleta voladora”. Nos contó Pavel que esta obra fue presentada en “ Venezuela hace 18 años, y tiene un argumento sencillo. Relata la historia de un inventor que quiere volar. El personaje estaba tan obsesionado por inventar una bicicleta voladora que no pensaba en amores. Eso hasta que Venus y Cupido deciden intervenir en su destino”. La puesta en escena de “La bicicleta voladora” mezcla la óptica del cine mudo – con mucha influencia de Charlie Chaplin – con un performance sustentado en la música y la danza, que son los elementos discursivos dominantes, ya que el sentido, aquí, va con el mismo ritmo de los sueños: único lugar de creación pura del espectador.
