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El canal de Panamá II

Fue el Emperador Carlos V de Alemania y Carlos I de España quien ordenó en 1524 escavar un canal interoceánico que comunicara los océanos Atlántico y Pacífico en el Istmo de Panamá, donde la distancia es de sólo 65 Km.

Alejandro de Humboldt presentó un proyecto de excavación a principios del siglo XIX. Napoleón III realizó los estudios y primeras excavaciones a partir de 1850, y el francés Ferdinand de Lesseps, constructor del Canal de Suez, presentó un proyecto en 1879 que fue finalmente emprendido, constituyéndose la Compagnie Universelle du Canal Interoceanique de Panama. Altos costos y enfermedades dieron al traste con este esfuerzo hasta que el presidente de Estados Unidos, Teodoro Roosevelt, asumió su culminación.

Los presidentes Jimmy Carter (EE.UU.) y Omar Torrijos (Panamá) firmaron en 1977 el tratado de devolución del Canal de Panamá, transfiriendo a los panameños la soberanía sobre la estratégica ruta interoceánica (Este cronista presenció aquel acto histórico que puso término a uno de los últimos reductos del colonialismo en América).

Si aquella fue una monumental obra de ingeniería que maravilló al mundo en 1914, la ampliación del Canal no lo es menos. Un tercer sistema de esclusas (dos nuevos juegos de esclusas -de 427 metros de largo por 55m de largo y 18,3m de profundidad- y un tercer carril para buques de gran calado en ambos lados de los océanos) han duplicado la capacidad del Canal. Se vaciaron 4,4 millones de metros cúbicos de hormigón de concreto. Las compuertas de las esclusas miden 57,6 metros de largo, 10,8m de ancho y entre 22,3m y 33,0m de alto. Su peso oscila entre 2.100 y 4.200 toneladas.

Con una inversión de US$ 5.250 millones, la construcción del canal generó más de 30.000 empleos. El proyecto fue ejecutado por un consorcio integrado por empresas de España, Italia, Bélgica y Panamá. El financiamiento correspondió a los bancos Japonés de Cooperación, Europeo de Inversiones, Interamericano de Desarrollo, Desarrollo de América Latina CAF e IFC – Banco Mundial.

La ampliación del Canal de Panamá es un ejemplo de cooperación fructífera entre el Estado, los organismos multilaterales y la empresa privada. Felicitamos al hermano pueblo panameño por esta obra tan beneficiosa para la humanidad.

@lxgrisanti

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