El legado de Giovanni Sartori

Italia y la Escuela de Florencia han parido notables intelectuales que han dedicado su vida a pensar, reflexionar y por supuesto a escribir y producir obras, tanto voluminosos libros como algunos artículos y opúsculos que conforman un inmenso aporte a la filosofía política, al derecho constitucional, a la ciencia política y demás. Estos autores se constituyen en referentes obligatorios que han hecho notables aportes especialmente en el campo de la ciencia política y dentro de esta en el estudio de la política, la metodología, la política comparada, la teoría política, el estudio de la democracia, los partidos y sistemas de partidos.

Giovanni Sartori se constituye sin lugar a dudas en unos de los más prominentes intelectuales, autor, pensador y referente “obligatorio” en el estudio de la democracia, partidos y sistemas de partidos. Sus obras han sido traducidas en más de una docena de idiomas y no puede concebirse un ensayo, un artículo o investigación seria que no haga referencia al este teórico florentino. Además no puede catalogarse a Sartori de un pensador inerme, neutral o de cúpula. Giovanni Sartori fue siempre un pensador de debate, discusión e intervención, jamás divorciado del mundo, de la realidad y de los propios fenómenos y cambios que el siglo XX registró, y más todavía, lo registrado en este siglo XXI plagado de mutaciones, transformaciones y demás.

Sartori logró desde temprana edad proyectarse como un denso intelectual junto a sus obras, descolló en las mejores universidades americanas, entre ellas Harvard y Columbia y por supuesto profesor de grandes universidades europeas entre ellas Florencia, Roma, Complutense de Madrid y Autónoma de Barcelona. En vida cosecho loas, reconocimientos y premios como el Príncipe de Asturias, Doctorado Honoris Causa por la Universidad Nacional Autónoma de México, Georgetown, Complutense de Madrid y otras debido a su trayectoria y por supuesto la valía y singularidad de  por sus obras.

Giovanni Sartori sin dudas tuvo una prosa siempre combativa, critica, en él se conjugaron intelectualidad con una dosis de mordacidad que le permitían siempre con la estatura académica intervenir en situaciones y circunstancias específicas de la política Europea o Italiana, sentado posturas críticas en relación a figuras de la política, la iglesia, la religión, el terrorismo, el islam, la televisión y otros. Sartori conforma una pieza y engranaje fundamental para el estudio de la democracia junto a pensadores como Arend Liphjart, Robert Dahl, Norberto Bobbio, Gianfranco Pasquino, Leonardo Morlino entre otros.

La ciencia política y los politólogos respectivamente tuvimos en Giovanni Sartori un referente de pensamiento limpio, heterodoxo, polémico y sobre todo sólido. Giovanni Sartori jamás hipotecó sus ideas y pensamiento, aspecto vital en un intelectual, su autonomía, pensamiento y accionar siempre se colocaron sobre cualquier poder de turno aspecto que aplaudimos más todavía cuando en nuestros países latinoamericanos los “intelectuales” terminan siendo unos saltimbanqui y muchas veces unos tarifados de algún político o poder de turno.

La ciencia política mundial en buena medida logró consolidarse y cimentarse por las reflexiones y densidad de las obras de este prominente politólogo a quien ciertamente reconocemos como unos de los padres de la moderna ciencia política. El legado de Giovanni Sartori esta en cada idea, en cada página escrita, en sus críticas e hipótesis que son parte de la reflexión mundial en torno a la democracia y los partidos.

(*) Profesor de la Universidad de Los Andes. E-mail: [email protected]