No basta con ser elegido democráticamente, hay que fortalecer las instituciones y aumentar el liderazgo de la sociedad

A juicio del expresidente del Perú, Alejandro Toledo, no es suficiente ser elegido democráticamente, sino que es necesario ejercer la democracia a través del fortalecimiento de las instituciones que la componen y del liderazgo de los diversos sectores de la sociedad.

Refirió que en la actualidad hay presidentes que se valen de las elecciones populares para acceder al poder, pero una vez se encuentran posesionados de sus cargos arremeten contra las mismas instituciones democráticas que  le permitieron el acceso al gobierno para eternizarse como mandatarios. «Se reeligen ellos mismos por años».

En tal sentido sentenció: «Necesitamos más liderazgo y menos política».

Toledo llama a la formación de un nuevo liderazgo alejado de los viejos vicios y de la corrupción de los políticos desprestigiados que abundan en los países del continente, pues los congresos y las instituciones democráticas requieren de nuevas caras.

Advierte que no es cierto que se esté volviendo a la estatización, sino que existen «ciertos lugares con regímenes autoritarios populistas, ciertos gobiernos que están estatizando los recursos naturales como el petróleo. Pronto vendrá una sustitución del petróleo como fuente de energía, ‘los Hugos Chávez’ de América Latina van a tener que prepararse porque las empresas que manejan van en franco deterioro, no hay forma de que muestren salud económica».

Citó el caso de Venezuela, conde existe un 60 por ciento de escasez de productos básicos.

Refirió que los regímenes como el de Venezuela con Nicolás Maduro en la presidencia, sólo piensan en el corto plazo y por ello tienen una inflación fuera de control y aplican políticas que desestimulan la inversión.

«No es suficiente ser electo democráticamente, sino que se debe actuar democráticamente».

Lamentó que la Organización de Estados Americanos, OEA, no haya activado los mecanismos previstos en la Carta Democrática y ha optado por cerrar los ojos frente a la violación de los derechos humanos que opera en Venezuela. Advirtió que los problemas de Venezuela comienzan a replicarse en Nicaragua, Bolivia, Ecuador y Argentina.

Estos comentarios los formuló el expresidente peruano durante el lanzamiento en American Society en Nueva York de su libro The Shared Society (La sociedad compartida), en el que examina la realidad de América Latina en un momento crucial en la historia. Toledo, que gobernó el Perú en el período 2001-2006, es fundador y presidente del Centro Global para el Desarrollo y la Democracia en Washington DC, refiere que durante las últimas décadas, en Latinoamérica ha operado un gran crecimiento económico, pero advierte que es preciso que dicho crecimiento sea sostenible y permita la incorporación de los miembros más pobres de la sociedad, quienes deben integrarse plenamente en los procesos democráticos de la región.

En tal sentido, Alejandro Toledo presenta una propuesta para minimizar la desigualdad, preservar el ecosistema y fortalecer la democracia en América Latina. «El libro es académicamente riguroso, pero es irreverente en la medida que mira al futuro. Hoy en día debemos exigir a los líderes a tomar decisiones hoy, sabiendo que no le va a dar la rentabilidad política para las próximas elecciones, pero sí va ayudar enormemente a las próximas generaciones.»

A su parecer Latinoamérica es una promesa en el continente y en el mundo, dado que posee recursos fundamentales, tales como agua y tierras fértiles.  Al mismo tiempo, los 50 microclimas que existen en toda la región permiten producir diversos productos agropecuarios para dar respuesta a las necesidades que supone traerá el crecimiento de la población y el deterioro de las condiciones ambientales.

Subraya la capacidad de América Latina de producir alimentos a gran escala, pero advierte que es necesario implementar un cambio en el sistema económico imperante, el cual prioriza la explotación de los recursos naturales en lugar de procesarlos, convirtiendo a los países  en socios capaces de gerenciar comercialmente los productos obtenidos. Esto, asegura, permite tener el control de la economía.

Para Toledo es imprescindible transformar el sistema en los próximos 35 años, de manera que América Latina apunte hacia la manufacturación, para lo cual la profundización y apropiamiento de la ciencia, la tecnología y la macro producción, son indispensables para asumir el control de la composición de los canales de crecimiento y producción. «Es una excelente oportunidad que hay que aprovechar,  hemos estado en el mercado como en un autobús sin chofer»

Refiere que hay condiciones que deben cumplirse para ello al tiempo que afirma que se han dado pasos de avance en este sentido, tales como la diversificación de los fondos, la firma de tratados internacionales, la mejora en la calidad de la educación, sector que requiere de más inversión.  Una inversión que, sostiene, debe estar dirigida a la formación, capacitación y entrenamiento de los profesores y a aumentar los salarios del docente. Nutrición y salud son los otros sectores que requieren atención y mejora.

Aunado a la optimización de estos sectores en toda la región Latinoamericana, Alejandro Toledo estima se debe crear una arquitectura de las instituciones democráticas, en la que se fortalezcan y se les otorgue independencia tanto en lo social, lo económico y lo jurídico.

«Hay que construir una democracia que  sea entendida y practicada por los pobres y por todos los estratos sociales, las reglas de las comunidad para igualdad y pobreza, necesitamos preparar a los jóvenes».