Compostura indeseable

Por supuesto apreciados lectores que esto no es un chisme, pero tampoco les puedo decir que lo ocurrido fue presenciado por mi persona Me atengo a destacarles sí, que tengo un video grabado que da cuenta de los hechos, y una información de prensa escrita que da cuenta de los sucesos. Debo pues formar presunción grave de que los hechos si ocurrieron en la forma que los narra la noticia, y de lo indeseable que ello hubiera sucedido, y de lo mal parado que quedan los sujetos intervinientes en la trifulca, pues luego de lo acaecido, ni prensa, ni radio, ni siquiera el satélite perdido han dado ninguna otra noticia sobre el suceso-
Me voy pues a difundir los hechos y la noticia, por que conociendo al candidato, sus pocas actitudes sensatas, su actuar poco ajustado a los de un tercio con pantalones bien puestos, y su lenguaje y estilo procaz, me hacen deducir la verdad de los mismos y la credibilidad que debe darse a las noticias así difundidas,
A finales de la pasada semana, esto es en la que terminó el cuatro de julio, en horas de la madrugada se difundió en la Web una vergonzante información sobre la imperdonable actitud de quien dice nos manda pero que es una desgracia para todos los venezolanos, consistente en el atropello cometido con un joven periodista que lo acompañaba con otros de sus pares en una rueda de prensa, y habiéndole de último tocado hacer las preguntas le formuló una por demás normal y no impertinente, la cual inicio a responde nuestro virtuoso personaje con una frases como esta: o similar: “ No chico, Uds. son una manada de imbéciles que buscan guiar al entrevistado para que conteste lo que Uds. quieren”.

El joven entrevistador de inmediato e interrumpiendo a su interlocutor le ripostó algo parecido a: “Si Ud. se dirige con ello a mi persona, debe ser que es Ud. quien tiene esa característica de imbecilidad” Y allí termino la entrevista, pues el señor Chávez, según continua la información, se le fue encima al reportero, con guardia de seguridad y todo, que por supuesto se abstuvo de intervenir y permitió que el pseudo dirigente le diera una cachetada al fablistán.

Seguidamente todo fueron sobresaltos, carreras, brincos del personal de seguridad que los separó e impidió una trifulca de mayores consecuencias etc.

Hasta aquí el cuento, pero paso ahora a formular los evidentemente pertinentes comentarios:
Primero, tal gesto y actitud de este pobre ciudadano que dice nos gobierna, deja mucho que desear. En efecto, si como hombre se sintió agredido de tal forma que se dio por insultado por el periodista, libre de escoltas y guardas, como lo debe hacer un hombre, es haber retado a su contrincante a limpiar esa ofensa como un verdadero hombre, bien por los puños o con las armas, pero libre de las escoltas, solos, como debe ser, para así dejar zanjada es ominosa infamia.

Hacer lo que hizo, dar la cachetada protegido por los Guardias de seguridad es una vil cobardía, que no tiene perdón de Dios, si bien, como que es una pésima costumbre que tienen los hombres de uniformes, pues así es como suelen actuar, demostrando con ello, la falta de hombría, y que solo se atreven a afrontar a un agresor cuando andan en gavilla con otros mas que le garantizaran respaldo y resguardo de toda contra-agresión.

Por último, definitivamente queda demostrado que este pobre infeliz que nos gobierna es una persona que no esta en sus cabales, pues cualquier ciudadano cabal, en primer lugar no provoca la pretendida estultez en que incurrió el agresor presunto, y mucho menos comete el desafuero de darle una cachetada a un hombre que no sabe si esta armado o desarmado y ponerse en riesgo ante cualquier patán, sino como corresponde y si fuera pertinente dispondrá se arreste y sancione al agresor, y con ello tampoco queda ante los terceros como autor de una conducta tan cobarde.

Si lo que he comentado y juzgado resulta mentira, que cierren a la Web y plataforma por la cual se difundió, pues resulta inicuo, insensatos y falta de respeto a la dignidad oficial dar cabida a esa naturaleza de noticias carentes de veracidad y que dejan mucho que desear para la dignidad de un Presidente.

Eso si, pero si resulta serio y verdadero lo antes narrado, no entendemos, en que consiste lo de información directa y veraz, al esconder y convertirse en cómplice de tan indeseables conductas de quien se dice conductor de los destinos de este país, y ha dejado demostrado su insensatez y cobardía.