Despierta Adeco:¡atrevete!
Si compañero, atrévete, ponte de pié, sin miedo y atiende el clamor de la gran mayoría del pueblo ADECO, para que el partido retome el camino que lo hizo grande, cual es asumir la defensa del humilde, de ese venezolano que se ve por todos lados, que sufre el abandono de un sistema injusto y anacrónico que será necesario entonces adecuar a la actual realidad del País y del Mundo.
Estamos en un periodo muy difícil en nuestra vida republicana, producto de una acumulación de problemas de variada índole, que no han tenido el tratamiento ni la orientación apropiada en los últimos años y que este gobierno totalitario junto a los partidos de honda tradición democrática como AD., se verán comprometidos con una mayor lealtad por Venezuela en la solución de éstas ingentes dificultades que hasta ahora son el mayor ingrediente en la desconfianza que se tiene a nuestro sistema político. Por eso AD tiene hoy más que nunca una responsabilidad histórica con su Pueblo y para esta tarea tendrá que hacer acopio de sus mejores hombres y mujeres para que podamos levantamos y tomar la calle nuevamente. El Adeco común quiere cambios sin violencia, quiere un liderazgo sin cuestionamiento y quiere también al dirigente trabajador, eficiente y honesto, aquel que no mire por la rendija del odio y el revanchismo, a ese dirigente que tiende la mano sin condiciones y está por encima de lo intrascendente.
No es difícil encontrar en AD gente con estas condiciones, ni es difícil tampoco hacer un diagnóstico o inventario de la situación que atravesamos, lo difícil es y he allí el reto, poner en movimiento a esta magnífica maquinaria para hacer posible y viable los cambios que con justicia se reclaman y que como meta de la organización nos atrevemos a señalar: PRIMERO: Hacer efectiva la justicia a través de la igualdad, procurando que los problemas sociales sean una responsabilidad de todos y en ello deberá privar una efectiva solidaridad. SEGUNDO: Orientar esfuerzos hacia una nueva estructura económica, con el objeto de fortalecer sus objetivos sociales y por ende democráticos. No podemos soportar por más tiempo las fallas de nuestro sistema educativo, por señalar solo una. TERCERO: Procurar como un mandato popular impostergable, cambios profundos para ejercer con transparencia el derecho al sufragio, demandando igualmente una mayor democracia interna en los partidos, así como mecanismos que garanticen la pulcritud y decoro necesarios tanto en el financiamiento como en el desarrollo de las campañas electorales, atendiendo cada vez mas a un mayor protagonismo de la ciudadanía en general en los asuntos de interés público. CUARTO: Se impone por encima de cualquier interés individual o grupal, establecer las condiciones para lograr en el menor tiempo posible, una real y mejor calidad de vida para nuestra gente, entendiendo por ello, a posibilitar efectivamente la superación de la creciente pobreza, el mejoramiento de la seguridad social en todos los sentidos y la garantía de las condiciones mínimas de dignidad y asistencia que merecen nuestros ciudadanos, para así hacer de Venezuela un País en donde valga la pena vivir.
Ahora nos duele profundamente que AD por primera vez en la historia no esta en el tarjetón, y es ésta la segunda elección presidencial consecutiva en donde el otrora glorioso partido del pueblo no presenta candidato propio, lo que resulta verdaderamente insólito e inaceptable, pero a pesar de los pesares Acción Democrática aun respira, tiene el fiel de la balanza electoral en su conciencia y el destino del país en sus manos. No quiero pensar ni me imagino qué ocurriría si al candidato de la unidad y la esperanza Manuel Rosales le llegara a faltar el medio millón de votos adecos para coronar este gigantesco esfuerzo contra el totalitarismo y la barbarie; seria entonces una tragedia descomunal y el puntillazo final al partido, así como la estocada definitiva a una Venezuela que merece mejor suerte y un destino glorioso. Por eso, compañero usted tiene la palabra: ¡DESPIERTA Y ATREVETE!
