Futuro cooperativista
Mucho se ha discutido acerca del cooperativismo, el cual ha sido impulsado por el Ejecutivo Nacional y surgido como una medida para paliar los elevados índices de desempleo registrados en el país. Miles de personas han apostado su futuro a esta actividad empresarial, pero la misma esta seriamente afectada por: la improvisación, el populismo, la falta de regulaciones, la inexistencia de políticas que definan los campos propicios de acción, las fallas para la conformación de un órgano fiscalizador y controlador eficiente, así como la ausencia de beneficios sociales que amparen y protejan a los cooperativistas.
Muchos emprendedores son convertidos compulsivamente en cooperativistas y otros son producto del clientelismos político. Es así como seudo líderes comunitarios, politiqueros, testaferros y oportunistas han devenidos en cooperativistas, sólo para darle palos a la piñata de los millardos petroleros, limitándole a los emprendedores honestos el acceso a los créditos.
En la misión Vuelvan Caras hacen esfuerzos para mejorar los niveles de formación de los emprendedores, pero no son suficientes. Muchos lanceros carecen de: disciplina para dirigir empresas; ética para el trabajo, cultura organizativa, nociones de administración, conocimientos básicos de contabilidad, comprensión cabal de la actividad que han decidido emprender y la mayoría no está consubstanciada con el espíritu, objetivos y principios del cooperativismo. Por otra parte desde Vuelan Caras, presionan indebidamente a los lanceros para conformar asociaciones de manera compulsiva entre individuos que se desconocen entre sí; promueven proyectos sin sustentación y viabilidad económica; conforman cooperativas con demasiados miembros que a la postre las inviabiliza y no conciencian a los emprendedores sobre los retos que significará la participación de nuestro país en mercados cada vez más competitivos y abiertos como MERCOSUR.
Necesario es trazar políticas serias, de largo aliento que vitalicen al sector cooperativista y aseguren su permanencia en el tiempo. Desterrar el populismo, la improvisación, el clientelismo y la corrupción deben ser prioritarias si queremos en el país un promisorio futuro cooperativista.
(*): Asamblea de Electores con la Revolución de Nueva Esparta (ASERNE)