Logro y dilemas
Ha sido más que obvia y exagerada la influencia norteamericana en nuestra cultura, gracias sobre todo a la tv y al cine. Para contrabalancear las cosas nace Telesur, canal informativo y cultural cuyo deber ser es expresar la visión que los latinoamericanos tenemos de nosotros mismos. A este naciente experimento lo evalúo como un paso bien concreto hacia la integración latinoamericana y uno de los pocos logros del actual gobierno venezolano. Es un hecho histórico poder ver un canal promovido por gobiernos en un campo donde los Ted Turner y los Gustavo Cisneros han mantenido, hasta ahora, una indisputada hegemonía.
Esta alternativa latinoamericanista y sus positivos propósitos no debería ser empañada por las innecesarias posturas de provocación hacia un gobierno en particular, el norteamericano. Noto al respecto un ímpetu infantil por escandalizar que no se compagina con un esfuerzo pionero y serio por abrir otra avenida cultural. Quienes dirigen Telesur tendrán que escoger si se dedican a proyectar informaciones veraces, oportunas y alternativas o se regodean en documentales arqueológicos como el que vi de un sempiterno Fidel haciendo el panegírico de un mítico Che. Deberán elegir entre informar más integral y verazmente que otros o convertirse en un canal “retro” estancado en el imaginario sesentoso de algunos. Elegir entre ser el canal proactivo de la integración de los pueblos latinoamericanos o el canal reactivo “contra el imperialismo yanqui”. Decantarse entre ser un canal de visiones críticas frente a todos los asuntos y gobiernos, tal como se los recalcó el asesor Tariq Alí, o ser un canal de barata propaganda en pro de algunos personajes, grupos políticos o gobiernos.
Esos son algunos de los dilemas de la naciente Telesur. Evaluar si los dineros públicos de varios países están bien invertidos allí y decidir si vemos o dejamos de ver ese canal es algo que nos toca a los latinoamericanos. Por eso resulta inoportuna, impertinente e insolente la moción de Connie Mack aprobada por el Congreso norteamericano. Ese tipo de medidas, expresión de la imperialista creencia de que América Latina es el patio trasero de los EEUU, es tan estúpida como utilizar a Telesur cual instrumento de infantil provocación y de burda propaganda.
