Opinión Nacional

¿Y ahora?

(%=Image(7256210,»L»)%)Los primeros pasos dados a partir de febrero en la oposición en aras a una posible unidad, dejan un sabor extraño en la boca de los venezolanos. Tres grupos intentan hacer lo mismo pero les cuesta sentarse a conversar y llegar a acuerdos. Parece una competencia para ver quien ofrece más y capta admiradores, se observa la evidente fractura en los partidos políticos y de las organizaciones civiles. Uno de los grupos persigue «construir una mayoría popular y democrática»; Primero Justicia, Movimiento al Socialismo, Izquierda Democrática, La Causa Radical, Solidaridad, Gente del Pueblo, Nueva Democracia, Asamblea de Educación y Compromiso Ciudadano.

El segundo grupo suscribió «Las 10 exigencias del pueblo democrático para el derecho al sufragio»; Enrique Mendoza, Acción Democrática, Alianza Agroalimentaria, Alianza Bravo Pueblo, Polo Democrático, Bandera Roja, Izquierda Democrática, Frente Institucional Militar, Gente del Petróleo, Fuerza Liberal, Grupo La Colina y Mujeres por la Libertad.

Un tercer grupo, convoca para el próximo martes 7 de marzo a la proclamación y firma del manifiesto “4-D un Mandato Nacional”. Será que: ¿se subrogan la representación del pueblo, no importa de que tendencia, de los que no asistieron a votar?; Marcel Granier, Oswaldo Álvarez Paz, Rafael Alfonso, Tulio Álvarez, Gerver Torres, Guillermo Zuloaga, Ramón José Medina, Liliana Hernández, Agustín Berríos, Soledad Bravo, Germán Carrera Damas, Martha Colomina, Gloria Cuenca, Oscar García Mendoza, Adolfo Herrera, Carolina Jaimes Branger, Manuel Peñalver, Freddy Malpica, Trino Márquez, Carlos A. Moro Ghersi, Simón Muñoz, Ignacio Enrique Oberto, Orlando Ochoa, Rosario Orellana, Eddie Ramírez, Eduardo Roche Lander, Aníbal Romero, Antonio Sánchez García, Manuel Felipe Sierra, Ricardo Zuloaga. Aun no hemos visto nada, quienes no votaron entregan su voto que no sufragaron, a otros que claman ¡La Victoria es mía!

Lo que si es cierto, es que las elecciones presidenciales se realizaran con varios candidatos o si se ponen de acuerdo quienes deben hacerlo, un candidato unitario pasado por el tamiz de las primarias. No solo es necesario, es importante. La política cambió en el país y hay muchos venezolanos aspirando a la presidencia de la republica. Si se obvia a algunos de ellos, por favor no se les reclame que vayan hasta el final.

Cerca de sesenta candidatos entre hombres y mujeres, aspiran a la presidencia: Chávez, (aspira a repetir, por ahora) 10 millones por el buche; Smith quien no es opositor, 10 millones de corazones; Ojeda, 10 millones de descorazonados y, Granier, Álvarez o Alfonso, 80% del mandato que les “otorgó” el pueblo, casi 12 millones de votantes. ¡Na’ guará!, 42 millones de votos y somos casi 26 millones de habitantes, de los cuales somos aproximadamente 14 millones de electores (el RE lo subirá a casi 17 millones). Nos faltan 25 millones de electores. ¡Ya se resolverá el asunto para que cada cual, este feliz y contento! El CNE actual da para eso y más.

Los mensajes de algunos candidatos son de una esperanza que pone los pelos de punta. Petkoff afirma que le hablará a Chávez como se merece, ya lo escucháremos: “Huy que miedo, para tus 300.000 rifles rusos, te tengo 301.000 rifles alemanes, o, ¡Teo, dame la hora!, “Te la daré cuando me de la gana, no cuando quieras”. También escuchamos posiciones de un cariz democrático y animan que da miedo. El miércoles 1 de marzo, en el programa que conduce en MVR-VTV Ernesto Villegas, Leonardo Carvajal, de la Asamblea de Educación, le dio al imperio hasta en las orejas. A la pregunta sobre las primarias que se realizaría en la oposición, respondió: “Que el método más democrático para escoger un candidato, era por encuestas”. Entonces, ¿para que vamos a ir a elecciones sí ya quien desgobierna tiene los puntos?

Quienes tienen la posibilidad de cambiar las cosas, son los que ponen peros y dificultades. Es bueno que todo suceda en este momento, porque obliga a quienes pretenden sacar ventajas del lío político en que nos encontramos, sentarse a buscar de una u otra manera, soluciones. Es el momento de no andarse por las ramas, si se quieren elecciones limpias, se debe exigir que se cumpla la ley. Pedir que solo se abran las cajas, nunca será aceptada por el ente electoral y causará mayor desasosiego y desesperanza en el elector.

La Ley del Sufragio y Participación Política, es una ley moderna en muchos aspectos. Fue sancionada el 13 de diciembre de 1997. La misma fue propuesta debido a que el método empleado en las elecciones efectuadas hasta ese momento, el proceso manual mataba el VOTO. Era popular en esa época el dicho: “Acta mata voto”, quedando así evidenciado que quienes gobernaron al igual que los de hoy, cambiaron la voluntad del ciudadano elector. La ley marco vigente, permite escrutar las boletas y compararlas con el registro electrónico o automatizado, en donde se expresó la voluntad de cada elector. Así mismo, impide el uso de cuadernos electorales, obliga a entregar el RE y muchas otras ventajas adicionales. Los procesos electorales realizados en el país en este periodo presidencial, no se han efectuados bajo la ley marco. Las diversas elecciones fueron normadas tanto por el ente electoral como por los partidos políticos conocidos como los de la IV. La elección presidencial de 1998, fueron automatizadas y realizadas con la participación de la empresa española INDRA.

Para intentar salir del atolladero en que nos encontramos, deberemos sortear tres dificultades extremas que de una manera u otra, se les deberá dar repuestas:
Extrema dificultad baja: Permanecer como estamos luchando cada uno por su propia cuenta, criticándonos unos a otros sin ofrecer alternativas de solución; Imponer candidatos para ver como me salvo mediante encuestas o por un dedo ungido; Subrogarse representaciones que no les incumben; No motivar al elector a participar masivamente sin la construcción de un mensaje unitario que llame a defender la democracia con el poder de los votos, etc., etc.

Extrema dificultad media: Quedarse como congelados ante la tamaña irresponsabilidad del estado; Hacer silencio ante las expropiaciones e invasiones promovidas por el estado; Callar ante el incremento de las misiones como votos clientelares; Creer que abstenerse liquidará al autócrata y que seremos salvados por el hada madrina: Y creer, y creer y creer…
Extrema dificultad alta: Enseriar la política; Respetarnos unos a otros; Reconocernos unos a otros; Unirnos mediante un pacto político para elegir a un nuevo Presidente, seleccionado este Representante del pueblo democrático mediante primarias, el 3 de diciembre de 2006.

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