Albright en Brasil y Argentina
La secretaria de Estado norteamericana Madeleine Albright reclutó el martes el apoyo brasileño para el fortalecimiento de las frágiles democracias latinoamericanas, pero no consiguió su respaldo para la lucha contra el tráfico de drogas y la guerrilla en Colombia.
En el inicio de una gira por cinco países sudamericanos, Albright dijo que su visita a Brasil evidenció que las relaciones bilaterales son las mejores en 50 años, mientras las diferencias «son mucho menos que las áreas de acuerdo».Pero el canciller brasileño, Luiz Felipe Lampreia, resaltó la «autonomía» de su país y afirmó que no participaría en la campaña masiva de Washington para combatir al narcotráfico colombiano. «Nos preocupan los posibles efectos del Plan Colombia sobre Brasil, en términos militares y en términos del narcotráfico», dijo Lampreia. «No tenemos ninguna intención de participar en una acción internacional conjunta».
Brasil, que comparte una larga frontera con Colombia en una remota zona amazónica, teme que la masiva campaña militar pueda arrastrarlo a la sangrienta guerra civil que azota a su vecino y desplazar refugiados a su territorio.Brasilia también teme que los narcotraficantes busquen nuevos mercados en el país de habla portuguesa, con una población de 165 millones. Se espera que Brasil se oponga al esfuerzo estadounidense, que prevé una inversión de 1.300 millones de dólares.
La jefa de la diplomacia estadounidense también buscó apoyo para la consolidación democrática de los países vecinos Ecuador, Perú y Venezuela. Albright se reunió brevemente con el presidente brasileño, Fernando Henrique Cardoso, para discutir las reformas democráticas en estos países, especialmente Perú, que estarán en la agenda del encuentro de presidentes sudamericanos programado para finales de agosto en Brasilia. «Creo que es muy importante que el mapa (de reformas) sea seguido si el señor (Alberto) Fujimori quiere tener respeto y credibilidad en la comunidad internacional», dijo Albright refiriéndose al presidente peruano.
Estados Unidos criticó la decisión de Brasil y otros países de ignorar los llamados a sancionar a Perú, tras la polémica reelección de Fujimori en mayo, pese a las denuncias de fraude.
Lampreia dijo que Washington y Brasilia estaban dejando atrás «viejas heridas» y que llamarían a Perú a aplicar una serie de reformas democráticas recomendadas por la Organización de Estados Americanos, entre ellas la transformación del poder judicial y el aparato de inteligencia.Brasil también quiere que Perú ponga a las fuerzas armadas bajo control civil.
El martes por la noche Madeleine Albright arribó a Argentina para conversar con el presidente Fernando de la Rúa sobre temas como el de los cielos abiertos, la desregulación telefónica, la seguridad regional y el acercamiento al ALCA
La llegada de Albright anoche a Buenos Aires, «no deparará grandes sorpresas», dijo una fuente gubernamental que solicitó no ser identificada. Según la fuente, en la Casa Rosada «la preocupación pasa por otro lado: como el brote de aftosa y la situación conflictiva interna» y se conjetura que no habrá grandes cuestiones de Estado ni acuerdos bilaterales. Durante su estadía, Albright se entrevistará con el presidente Fernando de la Rúa, el canciller Adalberto Rodríguez Giavarini, compartirá un desayuno de trabajo con empresarios locales y visitará la sede de la reconstruida mutual judía AMIA, que sufrió un atentado terrorista en 1994 con un saldo de 86 muertos.
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