Comunidad venezolana en Argentina exige justicia por abuso sexual a joven coterránea

Indignación y rechazo. Es el sentir que se ha generado en Argentina luego de que una joven nacida en nuestro país denunció que un comerciante al que contactó por un aviso laboral, la drogó y abusó sexualmente, un hecho que ha movilizado a la comunidad de venezolanos residentes en territorio argentino, exigiendo que el agresor, llamado Irineo Humberto Garzón Martínez, sea detenido y encarcelado.

Según reseña el medio argentino La Nación, el hecho se registró el pasado sábado cuando la joven de 18 años -cuyo nombre se reserva para protegerla- fue citada a un local en el sector Balvanera de la ciudad de Buenos Aires para realizar una entrevista laboral que había coordinado momentos antes por la red social Facebook.

Entrevista de trabajo

Thais, la madre de la víctima, dijo aque el acusado le pidió a su hija cenar el viernes para así «poder hablar sobre el trabajo«, propuesta que fue rechazada por la joven, que finalmente arregló presentarse el sábado por la mañana.

Ante esa circunstancia, la madre pidió a su hija que al llegar al lugar le envíe una foto del frente del comercio y los datos del dueño del lugar.

Finalmente, la joven arribó ese sábado al comercio, dedicado a la venta de indumentaria del rubro de la medicina, realizó la entrevista y comenzó a trabajar normalmente.

Droga en una bebida

Según el relato de la joven, durante la jornada de trabajo, Garzón le ofreció varias veces «un vaso de refresco o de jugo« que ella rechazó.

En medio de la jornada de trabajo, la víctima tomó un vaso de agua con algún tipo de narcótico y luego cuando estaba bajo sus efectos, la violó.

«Él le preguntó si quería jugo, ella lo rechazó e insistió que sólo tomaría agua directa del filtro, pero cuando fue a buscar, llegaron unas mujeres a comprar, en lo que ella termina de atenderlas, vio el vaso servido con agua pero inocente y distraída por el trabajo, se la tomó«, expuso la hermana de la víctima.

En un chat de Whatsapp, la joven expresó que “creo que el dueño de donde trabajo me drogó porque me siento mareada”, y agregó la dirección en dónde se encontraba.

«Me pareció aún más extraño cuando veo que le pasa el candado a las persianas, cierra todo con llave e inmediatamente le mando un mensaje a mi mamá porque tenía miedo y veo que estaba cerrando todo«, relató la víctima en una entrevista con el canal internacional TVV Noticias.

Aviso a la Policía

La hermana de la joven avisó de manera urgente a su madre, quien se encontraba cerca del comercio. La mujer enseguida denunció el hecho y oficiales de la Comisaría Vecinal de la Policía de la ciudad de Buenos Aires fueron al lugar. Al llegar, los agentes notaron que el comercio estaba cerrado con las persiana baja.

Tras llamar varias veces a la puerta, los policías entraron y encontraron a la joven tirada en una escalera, desnuda en la parte de arriba de su cuerpo y bajo el efecto de alguna sustancia. Al lado estaba el dueño del negocio, Humberto Garzón Martínez, que fue detenido.

La causa quedó a cargo del Juzgado Criminal y Correccional N°15, a cargo de la jueza Karina Zucconi, quien imputó al hombre por el delito de «abuso sexual simple» y le concedió la libertad condicional debido a que no tenía antecedentes penales. Asimismo, le impuso una orden de alejamiento de 100 metros del domicilio de la joven y prohibición de realizar cualquier tipo de contacto con ella, así como salir del país.

Venezolanos se movilizan

Lo cierto es que el hecho ha causado indignación en la comunidad de venezolanos en Argentina, quienes, a través de la etiqueta #GarzónViolador quieren darle mayor profusión al caso en las redes sociales, además de ejercer presión para que el agresor sea nuevamente detenido.

Asimismo, la familia de la joven está convocando una protesta este jueves para exigir justicia y que el acusado sea detenido

En este contexto, la embajadora del Gobierno interino en Argentina, Elisa Trotta Gamus, se refirió al repudiable asunto en su cuenta de Twitter: