Hollande aboga por una UE a varias velocidades «sin cerrar la puerta a nadie»
El presidente de Francia, François Hollande, reafirmó hoy su deseo de que los países de la Unión Europea (UE) que deseen avanzar «más rápido» en su integración puedan hacerlo, sin que ello suponga «cerrar la puerta» a ningún socio comunitario, lo que implicaría una UE a varias velocidades.
«No se trata de excluir a nadie» pero «tampoco podemos admitir que un país, el que sea, pueda impedir a los demás avanzar más rápido», declaró Hollande al término de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la UE.
La reunión de hoy, sin la participación del Reino Unido, sirvió para que los Veintisiete comenzaran a preparar la cumbre que la UE celebrará en Roma el próximo 25 de marzo para celebrar el 60 aniversario de la Unión y definir el futuro del proyecto comunitario tras el «brexit».
Al término de la reunión, el presidente francés reafirmó su visión sobre una UE donde algunos Estados puedan asociarse en fórmulas de «cooperación reforzada» que les permita avanzar a mayor velocidad en aspectos como la seguridad, la defensa, el empleo, la armonización fiscal, la cultura o la investigación, citó.
«Tenemos que ser capaces (…) de que algunos países puedan ir más rápido y más fuerte, sin perder la solidaridad conjunta y la cohesión a 27» , agregó Hollande.
El jefe del Estado francés reivindicó asimismo el pasado de la Unión Europea y arremetió contra los movimientos antieuropeístas como el ultraderechista Frente Nacional francés.
«Europa debe de estar orgullosa de su historia» en los últimos 60 años, en los que ha logrado «construir la paz, hacer un gran mercado, garantizar la cohesión entre los pueblos» y dar ejemplo de lo mejor que hay en materia de solidaridad, dijo.
Hollande reconoció que hay «debilidades» y «dificultades» en la UE y emplazó a la Unión a que en los próximos años demuestre «que está unida» y que tiene «valores».
El político francés reivindicó que Europa sea «una fuerza al servicio del mundo» frente «al proteccionismo».
Insistió en que la extrema derecha es una «amenaza» no solo en Francia, sino «en muchos países europeos» y apostó por profundizar en el proyecto comunitario para contrarrestar los «egoísmos nacionales».
«Los que dudan sobre para qué sirve Europa, solo tienen que hacerse una pregunta: ¿somos más fuertes juntos o no?», concluyó el presidente francés.
