Embajada de Francia en Caracas celebró con un evento presencial

El Embajador de Francia en Venezuela, Sr. Romain Nadal, ofreció una amena recepción con motivo del día nacional de Francia, que se celebra cada 14 de julio.

La Residencia abrió sus puertas nuevamente (no se realizaban eventos de gran tamaño desde el 2019), para recibir a un nutrido grupo de invitados que celebró la libertad, la igualdad y la fraternidad con música y artes plásticas. La agenda incluyó la develación de una obra de arte del autor Iván Salgrero Curiel, la participación de la fundación Orquesta Sinfónica Coro infantil y juvenil indígena Kanaimö y la banda AH Sinfónico (Anibal Hamilton Sinfónico).

Los invitados se reunieron en horas del mediodía y, luego de escuchar los himnos nacionales de Francia y Venezuela, a cargo de la cantante venezolana Beatriz Occéas, tuvo lugar el discurso del Embajador.

Nadal destacó, “si bien la pandemia ha dificultado nuestro trabajo, la Embajada y su equipo no ha dejado de trabajar a lo largo de los últimos 3 años… más que nunca hemos estado al lado de nuestras amigas y de nuestros amigos venezolanos, sobre todo en el ámbito de la cultura y de la cooperación, con la sociedad civil a través de numerosas organizaciones y fundaciones venezolanas”.

El arte tuvo un papel importante en la celebración. El artista venezolano Iván Salgrero Curiel, donó la piezaÁvila y Caracas, una escultura en hierro. Salgrero ha dedicado las últimas dos décadas a trabajar paisajes icónicos de Venezuela, como el Salto Ángel y Roraima. El artista siente profunda admiración por Francia y quiso donar su obra como una muestra de agradecimiento a la increíble labor del embajador Romain Nadal, a favor del desarrollo de las artes plásticas.

Un momento emotivo del día tuvo lugar cuando sonó el himno de Ucrania (a cargo de AH Sinfónico) y el Hymne à l’amour de Edith Piaf, interpretado por Beatriz Occéas, esto como un mensaje de apoyo a la resistencia ucraniana. “Francia y la Unión Europea se han movilizado en todos los frentes para apoyar a Ucrania en materia política, financiera y de armamento….estos esfuerzos continuarán mientras sean necesarios, es decir hasta que se pueda contemplar una solución política por la vía del diálogo”, comentó el Embajador Nadal en su discurso.

El evento también contó con la aplaudida participación de la Orquesta Sinfónica Coro infantil y juvenil indígena Kanaimö. Traídos por la Embajada de Francia especialmente para la ocasión, darán otros conciertos en Caracas. Esta orquesta fue creada en el 2018 y ha contado con el apoyo de los campamentos turísticos  de la zona. Los pemones deleitaron al público con un repertorio de música venezolana, interpretada con canto e instrumentos de cuerda.

El Embajador Romain Nadal expresó en su discurso, su profundo agradecimiento a todas las empresas venezolanas y francesas que apoyaron la realización de este evento, sin el cual no habría sido posible.

La banda AH Sinfónico estuvo a cargo del cierre, animó a todos con su impresionante energía en escena y con ese ritmo, se despidieron los invitados hasta el año que viene.

Discurso del Embajador Romain Nadal con motivo del Día Nacional de Francia

Distinguidas autoridades,

Estimadas y estimados jefes de misión y miembros del cuerpo diplomático,

Queridas y queridos compatriotas franceses,

Queridas y queridos amigos venezolanos,

¡Qué alegría volvernos a encontrar!

¡Qué placer poder recibirlos de nuevo en la Residencia de Francia para la celebración de nuestra Fiesta Nacional por primera vez desde el 2019!

A pesar de que la pandemia sigue, a pesar de la necesidad de siempre cuidarnos, estoy sumamente feliz que podamos retomar esta tradición de la manera la más “normal” posible y que estemos reunidos para celebrar la Libertad, la Igualdad y la Fraternidad.

Si bien la pandemia ha dificultado nuestro trabajo, y especialmente estos grandes eventos, la Embajada y su equipo nunca dejaron de trabajar por la amistad franco-venezolana y por los franceses en Venezuela a lo largo de los últimos 3 años.

Al contrario hemos multiplicado nuestros esfuerzos para responder a los nuevos desafíos y necesidades.

Más que nunca hemos estado al lado de nuestras amigas y de nuestros amigos venezolanos, sobre todo en el ámbito de la cultura y de la cooperación, con la sociedad civil a través de numerosas organizaciones y fundaciones venezolanas.

Les hemos propuesto en el último año una gran oferta cultural y educativa, desde el festival de Artes escénicas hasta el de cine francés, desde conciertos de música clásica o de Daft Punk hasta obras de teatro, desde seminarios científicos y académicos hasta clases de francés en zonas desfavorecidas y desde la Noche de las ideas hasta becas para estudiar en Francia.

Les agradecemos de corazón por haber acudido con mucho entusiasmo a estos eventos y programas nuestros, al igual que a los de la Alianza francesa o del Colegio Francia con los cuales trabajamos siempre de la mano.

Vamos por más en los próximos meses y les invito a seguirnos en Twitter y en Instagram @embafrancia para estar pendientes de nuestra programación.

Sabemos lo que ha sufrido estos últimos años una gran parte de la población venezolana en lo social y humanitario.

Por eso, hemos desarrollado como nunca antes nuevos programas en pro de las venezolanas y los venezolanos, apoyando tanto a organizaciones de la sociedad civil locales como a organizaciones internacionales presentes aquí. El trabajo tan comprometido de esas organizaciones nos comprueba cada día la importancia imprescindible de un espacio cívico abierto.

Con ellas pudimos desarrollar muchas iniciativas que hacen una diferencia en la vida de la gente – comedores populares y escolares, jornadas de salud, empoderamiento de las mujeres y lucha contra la violencia de género, promoción de los derechos civiles y políticos, de las comunidades indígenas y de la población LGBT+, protección del medio ambiente, iniciativas para la juventud y por la inclusión, y tantas otras que no puedo enumerar. Aprovecho aquí para saludar la familia de Virgilio Trujillo Arana, líder indígena de la etnia Uwottuja y defensor de la Amazonía venezolana, asesinado hace solo algunos días. 

Cada vez que me desplazo con mi equipo para ver las realizaciones de estas organizaciones con el apoyo de Francia – ya sea en Petare, en Catia, en Barinas, en el Estado Sucre, en Falcón, en el Estado Bolívar (para nombrar algunos lugares que pude visitar desde el año pasado) – nos llenamos de orgullo y de esperanza en este maravilloso país y en su gente.

También hemos estado al lado de nuestras amigas y nuestros amigos venezolanos para tratar de ayudar a resolver la crisis política, manteniendo contactos con todos los actores relevantes, venezolanos e internacionales, y para que se pueda reanudar cuanto antes el proceso de negociación de México, a través del cual los propios venezolanos deben encontrar soluciones.

Lo hacemos por los venezolanos pero también porque somos conscientes de nuestras responsabilidades como país miembro permanente del Consejo de seguridad, comprometido por la paz y la seguridad mundiales, y que ejerció el semestre pasado la presidencia del Consejo de la Unión europea en un contexto de gran inestabilidad geopolítica.

Además de nuestras acciones hacia los venezolanos, nunca olvidamos nuestra querida comunidad francesa residente en Venezuela y mantenemos, gracias a nuestra sección consular, una gran calidad de servicio para ella: documentos de identidad disponibles más rápidamente que en el propio territorio francés; ayuda social frente a las dificultades económicas; giras consulares frecuentes por todo el país a pesar de la diminución constante de la población francesa en el interior; información cada vez más clara sobre los trámites en nuestro sitio web; y este año específicamente, cuatro jornadas electorales perfectamente organizadas en Caracas para que puedan participar en la vida democrática de nuestra patria.

Hecho totalmente excepcional también, desde la cancillería de la Embajada, hemos organizado varias jornadas de vacunación contra la Covid-19, tanto como vuelos especiales hacia Francia durante el pico de la pandemia para ayudar directamente nuestra comunidad o venezolanos que viven en Francia.

Por todo esto, quiero dar un caluroso agradecimiento a todo el equipo de la Embajada que trabaja en los distintos temas que acabo de nombrar y que así da vida a la relación franco-venezolana. No puedo olvidar agradecer también a todo el personal de comunicación, gestión, contabilidad, informática, seguridad, servicio, a los asistentes y a los conductores, a todas y todos los que hacen nuestro trabajo posible y cuyos esfuerzos permiten, entre mil cosas más, eventos como el de hoy.

Quiero también saludar a 3 colegas que culminan su misión en Venezuela en las próximas semanas, una embajada no es únicamente un Jefe de Mision es un equipo diverso unido y amante de Venezuela:

• mi asistente directa Claire Boistard, quien después de 3 años en Caracas y varios cargos en Latinoamérica, va a descubrir otro mundo en Jerusalén “bonne installation Claire”;
• nuestro gendarme Frédéric Tierz, quien va a seguir usando el español en su nueva misión en Canfranc, en la frontera franco-española y quien fue presente en Caracas durante los periodos complejos a nivel de seguridad en particular de 2019. Quiero agradecerle particularmente por su compromiso permanente con el trabajo de seguridad tanto en la Embajada como en la Residencia y decirle que fue siempre agradable compartir con él nuestras anécdotas del sur de Francia ;
• y mi adjunta la primera consejera Alexandra Bellayer-Roille, quien ha sido durante 4 años una Jefa adjunta de Misión ejemplar, muy profesional, muy competente y muy comprometida con Venezuela. Es una trabajadora incansable, una redactora de primer nivel, una analista política exigente, una oficial de seguridad siempre atenta a la protección de las personas y de la comunidad francesa, una responsable de equipo siempre atenta a la cohesión de los trabajadores y al respeto de la igualdad de género y de la inclusión social. Durante su misión, Alexandra se comprometió con el desarrollo de nuestro apoyo a la sociedad civil venezolana. Si, en 2017 no había ningún presupuesto humanitario en la embajada, gracias a su trabajo y al del equipo cultural y de cooperación, alcanzamos los 4 millones de euros de presupuesto (PISCCA, ayuda alimentaria). Quiero expresarle mi más profundo agradecimiento y decirle que sin ella nunca hubiéramos logrados tales resultados. Le deseo lo mejor  para la próxima etapa de su carrera.

¡Un aplauso para ellos y para todo el equipo de la Embajada por favor!

Quiero terminar con los agradecimientos dando mi más profunda gratitud a todos nuestros socios – empresas venezolanas y francesas – que apoyaron la realización de este evento de mil maneras y sin las cuales este evento no habría sido posible.

Queridas amigas y queridos amigos,

Como lo saben, Francia y Venezuela comparten mucho.

A través de sus regiones de Ultramar, Francia es también un país americano y caribeño fronterizo de Venezuela. Por su historia y su población, Venezuela tiene gran parte de sus raíces en Europa.

Pero lo que más no une son los valores. Permítanme al respecto citar el discurso del Presidente Charles de Gaulle durante su visita a Caracas en el 1964: “Ni ustedes venezolanos ni nosotros franceses podemos olvidar que son ideas provenientes de Francia que alguna vez inspiraron sus conciudadanos que lideraron el movimiento independentista. […] Francia recuerda la simpatía que el pueblo venezolano siempre le ha expresado, y especialmente el apoyo que en los peores momentos de la segunda guerra mundial, brindó a la causa de la Francia combatiente y la alegría que manifestó cuando se enteró de la liberación de París – aquella ciudad donde tantos de sus conciudadanos, desde hace tanto tiempo, vinieron a complementar su educación o ampliar sus conocimientos”.

Esta misma solidaridad, esta misma pasión por la libertad, la igualdad y la fraternidad, este mismo “respeto mutuo entre dos pueblos independientes” (según las palabras de Charles de Gaulle) nos siguen animando hoy en día.

Por lo tanto, ni nosotros ni ustedes podemos permanecer indiferentes frente a la agresión rusa en contra de Ucrania.

Esta invasión a un país soberano, la primera en Europa desde el 1945, es la negación absoluta de nuestros valores comunes. En un mundo que deben de construir más reglas de gobernanza frente a los desafíos globales, es un retroceso inmenso hacia “la ley del más fuerte”, donde un país grande impone su voluntad a un pequeño por la fuerza.

Más allá de Europa, la agresión rusa tiene consecuencias para el mundo entero, amenazando el abastecimiento mundial en alimentos y provocando desde ya una inflación inédita.

Es la razón por la cual Francia y la Unión europea se han movilizado en todos los frentes: apoyo a Ucrania en materia política, financiera y de armamento; acogida de los refugiados; sanciones para detener a Rusia; contribución a las investigaciones sobre posibles crímenes de guerra; así como el lanzamiento de la iniciativa FARM para paliar el impacto de la guerra en materia de seguridad alimentaria. Estos esfuerzos continuarán mientras sean necesarios, es decir hasta que se pueda contemplar una solución política por la vía del diálogo.

Desde Caracas, quisimos mandar hoy un mensaje de apoyo a la resistencia ucraniana y un mensaje de paz, así que, antes de pasar al brindis y a la hermosa programación cultural que les tenemos preparada con una coral de jóvenes Pemones de Canaima y un concierto del talentoso grupo venezolano AH Sinfónico, los invito a que escuchemos juntos el himno de Ucrania y el “himno al amor” de Edith Piaf.

Una vez más, gracias a todas y todos por acompañarnos hoy en nuestra Fiesta Nacional y gracias a nuestros socios y a todo mi equipo por permitir este maravilloso evento.

¡Viva Francia!

¡Viva Venezuela!

¡Viva la amistad franco-venezolana!