Venezuela no es Ucrania
Primero que todo hay que tomar en cuenta que Ucrania es un país prácticamente dividido en dos mitades, una pro rusa y otra pro occidental. También después de la disolución de la URSS se ha convertido en un territorio codiciado por Occidente tanto por razones económicas como geopolíticas, pero Rusia no tiene la menor intención de permitir que se separe de lo que ella considera su zona de influencia.
Ucrania en Europa y Siria en el Medio Oriente son terrenos fundamentales para el enfrentamiento entre las diversas potencias que juegan actualmente en el escenario internacional. En cambio la situación en nuestro país, si bien es cierto que hay intromisiones extranjeras, principalmente la cubana y en menor medida la China, brasileña y rusa, no representa, por ahora, una zona vital de enfrentamiento entre los grandes poderes. Más bien es vista como una situación anómala, más bien caótica en un país que tiene cierta importancia desde un punto de vista energético pero que es mucho menor de lo que pensamos en Venezuela.
Es verdad que Venezuela está escindida en prácticamente dos mitades pero no por hechos culturales o religiosos sino por visiones diferentes de corto plazo sobre la manera de utilizar el maná petrolero para generar el mayor bienestar de la población.
En Venezuela la crisis se irá superando en la medida que uno de los dirigentes de las mitades logre convencer quién puede y quién no traer mayor bienestar al pueblo venezolano. Es un camino complejo pero posible y con toda seguridad no surgirá de la violencia sino de la inteligencia.
