Opinión Internacional

Colombia y Venezuela (I)

Durante 20 días las relaciones diplomáticas entre Colombia y Venezuela quedaron rotas. La quiebra se produjo el 22 de Junio, a los 22 días de que Juan Manuel Santos ganase la segunda ronda presidencial, y la recomposición de éstas se dio a 3 días de que él jurase como el nuevo mandatario de su país.
En los 8 años que duró el gobierno de Alvaro Uribe (2002-1010) las tensiones con sus únicos vecinos con quienes comparte la misma bandera amarillo-azul-rojo fueron en aumento, particularmente en la recta final. Tras que en Marzo 2008 las tropas colombianas capitaneadas por el entonces ministro de defensa Santos exterminasen a un campamento de las FARC en suelo ecuatoriano, Quito rompió relaciones con Bogotá y los ejércitos de Ecuador y Venezuela se movilizaron.
Gradualmente, los vínculos entre Uribe y  Correa se fueron recomponiendo, mientras que la justicia ecuatoriana sigue pidiendo a Santos por haber violado su territorio. En tanto que las pugnas entre Uribe y Chávez, los dos presidentes latinoamericanos que más han gobernado al mismo tiempo, constantemente llegaban a planos agrios y personales.
Tras que Ecuador decide el fin de la base militar norteamericana en Manta, los EEUU llegan a un acuerdo con Colombia para establecer unidades militares suyas dentro de 7 bases colombianas. Todo ello genera una serie de ataques de Caracas quien sostiene que se busca preparar así una invasión contra ésta.  
Durante las elecciones colombianas Chávez lanzó duros reproches contra Santos, el candidato de Uribe, las mismas que fueron capitalizadas por estos últimos para aparecer como abanderados de la nación y del antiterrorismo. Tras el balotaje del 30 de junio Uribe decide que uno de sus últimos actos antes de dejar la presidencia el 7 de Agosto sería demostrar la presencia de al menos 1,500 guerrilleros colombianos en suelo venezolano.
En respuesta a ello Caracas rompe oficialmente relaciones con Bogotá el 22 de julio aduciendo que las pruebas de la presencia de las FARC y el ELN en su territorio son fraguadas. Mientras tanto Uribe acentúa sus denuncias y, antes de dejar el poder, él presenta una demanda contra Chávez en la Corte Penal Internacional y contra su república ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
En todo momento Santos se mostró reticente a pronunciarse mientras que él no fuese el presidente, en tanto que diversos gobiernos buscaron mediar entre él y Chávez.
Santos decidió dar un giro en las relaciones aceptando restablecer éstas con Chávez. Esto ha sido interpretado por unos como un distanciamiento entre él y su mentor Uribe y por otros como una jugada doble calculada en la cual el ex presidente actúa como garrote y su sucesor como la zanahoria.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba