La contemporaneidad del mercado del libro venezolano
Si algo bueno ha traído la crisis en Venezuela, de estos últimos años, ha sido -producto en parte del bloqueo de adquisición de moneda extranjera- el surgimiento -al parecer definitivo- del nuevo mercado del libro nacional, las pocas editoriales existentes en el país y las distribuidoras –algunas se transforman en editoras- se dedicaron de lleno a la apertura del mercado a punta de publicaciones venezolanas, eso se observa con creces este año (2006) y quien gana con todo ello es sin duda la nación.
En el campo de la edición se ve como existen empresas como Alfagrupo (ediciones Alfa) que han luchado mucho y que cada año logran publicar más, la reactivación de Monte Ávila, la creación de libros de El Nacional, las excelentes ediciones de Armitano, las de Cultura Urbana, las de la Universidad Católica Andrés Bello, las de Panapo, las de Bid & co Editor, las de Paredes Libros y otras más que existen en Caracas; en la provincia la referencia obligada es Mérida, aquí existen cerca de diez editoriales entre las del otro @ el mismo, la novel del Instituto de Cultura de la Alcaldía del Municipio Libertador, el consejo de publicaciones de la Universidad de Los Andes, las de ediciones del solar, la de escritores merideños, otras más que se escapan y las que represento agrupadas –ahora- en Grupo Tatuy (Grupo Tatuy, Iurisconsultum y Tierra Tatuy) Todas éstas son un claro ejemplo de la apertura del mercado literario en cuanto el libro venezolano.
Ahora, también en el campo de las librerías se ve un avance, quizá mayor, alfagrupo tiene sus propias librerías, el Estado Venezolano aporta la mayor extensión con la red Kuaimare –aunque deben redimensionarse-, luego están los grupos de librerías que se observan en Caracas y se extienden por varias localidades de Venezuela como Tecni-ciencia, librerías Nacho, librerías Las Novedades, pero existen otras ofertas como Librería Europa en Maracaibo, Librería Macondo y Librería Suma en Caracas, también las de Comercializadora de libros Ismael Silva (en Valencia y Maracaibo), así como las de nuestra empresa –partiendo desde Mérida- que las hemos definido Casas de cultura (por su diversas de ofertas no sólo en libros) y que están comenzando para aperturarse en algunas partes de Venezuela y Colombia (2007); en fin la oferta del libro venezolano hoy es mucho mayor y mejor que antes, además se observa en crecimiento.
Esto, es la vista de las nacionales que entre sus tantas ventajas tiene una muy importante: la inversión del recurso humano venezolano en nuestro propio terreno –que es, entre otras tantas aplicaciones, lo que falta en el resto del orden socio-económico venezolano-, aunado a capital que antes tenía otro destino.
Bien, pero y las trasnacionales ¿qué han hecho?, ¿qué hay de ellas? En la actualidad, toca pedirles que ayuden al crecimiento de las publicaciones venezolanas, ya que con lo que se ve se demuestra que existe mercado; no obstante, algunas ya hacen algo, es el caso de Random House Mondadori que con su editorial Debate ha publicado libros en torno a sociología, política y poco de literatura diversa, quizá un poco superior es la situación de Editorial Planeta Venezolana, que comenzó este año ha trabajar nuevamente el mercado nacional con distintas opciones. Pero aparte de ello, nada más, falta mucha actividad de las otras (Océano, Larousse, Fondo de Cultura Económica) y se hace exigible para que la carga sea menor y además ayuden a introducir –con sus estructuras- las publicaciones venezolanas en los mercados de otros países iberoamericanos.
En la contemporaneidad de estos polémicos y difíciles tiempos para Venezuela, se puede decir que el mercado del libro es otro –por lo menos algo bueno se ha sacado a pesar de todo-, que el libro venezolano parece conseguir un sendero en la población, ahora habrá que seguir luchando por ello como se ha hecho en estos últimos tiempos, han visto que si el mercado se incentiva reacciona. Desde estos lugares se agradece seguir por muchos obstáculos que haya –sin envidia ni egoísmo-…; nuestros territorios particulares, llamados en su conjunto socio-político: Venezuela, necesitan creación, aplicación y desarrollo, la gente de nuestros lugares, visto que se pueden hacer buenas cosas, esperan impacientes por más, mucho más. En nosotros está la responsabilidad.
