Monseñor Roberto Luckert exige respeto y moderación
Para el arzobispo de Coro, monseñor Roberto Luckert, han sido en extremo desproporcionados los señalamientos del presidente (%=Link(«/bitblioteca/hchavez/»,»Hugo Chávez»)%) al inicio de la campaña electoral, a través de los cuales el mandatario nacional nuevamente agredió a la Conferencia Episcopal en la figura de Baltazar Porras, a quien acusó de ser «un adeco con sotana». En su opinión, el jefe del Estado no responde a los planteamientos de aquellos que disienten, «él ataca, agrede y humilla».
A Luckert, quien exige respeto a las instituciones, le gustaría preguntarle al presidente Chávez si en una democracia bien entendida pertenecer a un partido supone una mácula, ofensa o humillación.
«Le pregunto a él si ser copeyano es pecado, y si acaso lo será para su padre y su madre que fueron dirigentes de Copei y ocuparon puestos de gran relevancia en la política educativa de Copei en Barinas. No creo que el papá y la mamá del presidente de la República se sientan avergonzados de haber servido a Venezuela al militar en un partido político como Copei».
Considera que el tono de pelea, la agresión y los intentos por tratar de descalificar a sus oponentes no es la actitud más oportuna para un inicio de campaña, por lo que le pide, «por favor», al Presidente que sea mucho más moderado, ya que «sabemos dónde comienzan los vientos, pero no sabemos dónde terminarán las tempestades».
Monseñor le recordó al Presidente que «así como el soberano un Domingo de Ramos aclamó a Jesucristo como rey y mesías, ese mismo soberano el Viernes Santo lo estaba crucificando en la cruz, por eso le pido al Presidente mucha moderación y respeto a las instituciones, en este caso a la Conferencia Episcopal en la figura de monseñor Baltazar Porras».
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