Vuelvan caras…!
Leyendo en medios públicos y sociales los comentarios y las descalificaciones que los oficialistas hacen sobre María Corina Machado (MCM), me doy cuenta, o más bien compruebo, que la quirúrgica claridad retórica que utiliza esta heroína enceguece a sus oponentes… es como una bomba atómica que vuelca luz sobre la oscuridad que esconde las carcomas que aquejan a nuestra sociedad. Frente a MCM, se sienten los oficialistas totalmente desnudos, tan desnudos, que hasta maquiavélicas personas como José Vicente Rangel (JVR) ponen la torta al envestirla, logrando sólo reforzar aún más, con sus desatinados ataques, las brillantes estocadas de esta campeona de la libertad.
Y es que MCM no sólo canta claro sino que nos arenga para que permanezcamos unidos y fuertes en nuestro inmediato futuro… en nuestras próximas pruebas.
Es ella quien le da verdadero valor y sentido a las palabras del General Páez (que van como título de esta nota). Ya que esas palabras, como tantas otras significativas de nuestra cultura, han sido confiscadas y desnaturalizadas por el maquiavelismo institucionalizado.
Es ella el clarín que nos mantiene alertas y nos inspira a no desfallecer. Es ella quien nos mantiene fieles a la buena ética y vigoriza los valores que mucho más de seis millones de venezolanos llevamos muy dentro de nuestro ser.
Es ella quien nos confirma el orgullo de sabernos opositores para gritarlo a viva voz y es ella quien nos descifra los eufemismos que naturalmente florecen en las dictaduras para esconder las incómodas verdades que opacan nuestro discurrir y hacernos reaccionar.
Es ella (MCM) quien nos enseña, con su actitud, que todos podemos, si verdaderamente queremos, ponernos como ella a la cabeza de esta lucha democrática para poder lograr una sociedad llena de vida y bienestar. Una sociedad alejada de la angustia, de la ansiedad y del miedo irracional.
No la dejemos sola…
