Tendencias

Planta Barquisimeto se recertifica con el Sistema de Inocuidad FSSC22000

Garantes de la calidad de galletas con más de 100 años de historia como Oreo, o la venezolanísima Club Social; el equipo de Kraft Foods Planta Barquisimeto, demostró su compromiso con los venezolanos, al lograr la recertificación del Sistema de Inocuidad FSSC22000.

Edward Sojo, director de Manufactura de Kraft Foods Venezuela, reconoció el trabajo de todo el equipo para el logro de este objetivo. “Hoy celebramos esta recertificación, gracias a la responsabilidad con la que los casi 1.400 trabajadores que hacen vida en Planta Barquisimeto manejan el Sistema de Gestión de Calidad e Inocuidad Alimentaria, que desde el año 2012 está reforzado por la norma internacional FSSC22000 (Food Safety System Certification).

Cada año, con los resultados de las auditorías externas, este equipo ha demostrado que conoce y respeta con profundidad el Sistema, asegurándole a sus consumidores que pueden disfrutar de estas galletas y regalarse deliciosos momentos de alegría.

“En Kraft Foods Venezuela, tenemos un compromiso con el país, con todos los venezolanos que nos abren las puertas de sus casas a través de nuestros productos, eso compromiso nos mueve y nos motiva a seguir creciendo y avanzando en el camino a la excelencia”, afirmó Sojo.

Responsabilidad con Venezuela

Kraft foods Venezuela con sus dos plantas, ubicadas en Valencia y Barquisimeto, han mantenido el compromiso hecho por la empresa hace más de 80 años. En el 2014, ambas plantas han sido distinguidas en temas de mantenimiento de la calidad de sus productos y su relación con el medio ambiente.

A mediados de año, Planta Valencia fue honrada con el Premio Turpial, reconocimiento otorgado por el cumplimiento con la Normativa Ambiental en Materia de Efluentes Residuales, Emisiones Atmosféricas, Desechos Peligrosos y Materiales Peligroso.

Las distinciones obtenidas refuerzan lo que Kraft Foods Venezuela afirma, entregar productos de la más alta calidad y mantener los estándares de seguridad de clase mundial en los alimentos que producimos, y en el entorno laboral de nuestros trabajadores.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba